El término de inmótica es un concepto novedoso en el ámbito de las tecnologías. Diariamente, aparecen nuevas propuestas para mejorar nuestra calidad de vida e incrementar la funcionalidad de nuestros inmuebles.
A partir de aplicaciones que permiten controlar la calefacción, la iluminación o hasta la vigilancia de la seguridad, las automatizaciones inteligentes permiten que mejoremos la eficiencia energética y ofrezcamos un mayor grado de bienestar, entre otros aspectos.
Te queremos contar qué es la inmótica, en qué se diferencian fundamentalmente la domótica y la inmótica y cuáles han sido sus principales aportaciones.
✅ ¿Qué es la inmótica y en consite?
La inmótica revoluciona la automatización de edificios al concentrar datos y aplicar un control inteligente, optimizado y eficiente.
Así pues, esta modalidad nos permitirá gestionar los elementos de nuestro edificio con total independencia de su tamaño y dificultad.
La inmótica integra la domótica interna en una estructura de red. En términos generales, nos permitirá aprovechar la más avanzada de las tecnologías para producir un importante ahorro energético.
Con la domótica podemos gestionar y controlar numerosos elementos de los edificios. Eso es especialmente útil en los edificios de gran envergadura y en los de carácter terciario.
✅ Las diferencias entre domótica e inmótica
Afortunadamente, para lo que podríamos imaginar, la inmótica y la domótica no constituyen sistemas opuestos. Al contrario de lo que podríamos pensar, podríamos entenderlos como un denominador común, aunque con ciertas diferencias.
En términos generales, la mayor característica que los diferencia consiste en que si bien la domótica controla y administra las aplicaciones inteligentes de un domicilio, la inmótica se encarga de controlar y administrar las automatizaciones en edificios de mayor tamaño que no está concebido como vivienda.
Ahora bien, esto no significa que no se puedan aplicar los elementos que empleamos en la inmótica a nuestra vivienda, o a la inversa.
Los dos sistemas pueden ser complementarios y sus elementos podrán utilizarse en ambas situaciones.
Una de las diferencias fundamentales entre la domótica y la automatización de edificios es la complejidad de sus accionamientos.
Si bien en la domótica los elementos resultan mucho más sencillos y baratos, y están orientados a funciones específicas, las soluciones utilizadas en la inmótica suelen ser mucho más sofisticadas, eficaces y costosas.
✅ Beneficios de la inmótica
Si bien es cierto que ambos conjuntos tienen importantes ventajas a la hora de automatizar y administrar los procedimientos, si nos enfocamos en los beneficios puntuales de la inmótica, podemos encontrar los siguientes:
- La reducción clara del coste energético y de funcionamiento, además de una mejora en cuanto a la sostenibilidad en los edificios.
- Un mantenimiento correcto para los grandes edificios.
- Mejor control del funcionamiento del edificio a partir de la monitorización, al poder controlar el rendimiento de las diferentes instalaciones mediante un único aparato de control.
- Mejora de la seguridad y del bienestar, siendo capaz de detectar posibles incendios, caídas en alguno de los sistemas o accesos no autorizados al edificio.
✅ Las soluciones y usos de la automatización
Esta modalidad de automatización hace posible la gestión eficiente de grandes edificios, de manera que las solicitudes y soluciones propuestas son diversas.
Fundamentalmente, esta tecnología se aplica para administrar de forma eficiente el conjunto del funcionamiento de edificios tales como oficinas, hoteles, complejos comerciales, urbanizaciones cerradas, diferentes industrias e inclusive otros edificios como pueden ser hospitales y, en líneas generales, todo edificio terciario.
Mediante un único dispositivo se puede controlar los siguientes elementos:
- Los ascensores.
- La temperatura y la humedad del edificio.
- El riego en el caso de zonas ajardinadas.
- La calefacción y climatización.
- Control de ventanas y persianas.
- Sistemas de control de acceso y alerta.
- El control de incendios.
En España, existen iniciativas legales para establecer la obligatoriedad en el uso de instalaciones de control y automatización de hogares y edificios para mejorar la eficiencia energética.
Muestra de ello, es el Plan Estatal de Vivienda correspondiente al periodo 2018-2021, que contempla actuaciones e implantaciones subvencionables sobre sistemas de domótica e inmótica.
A grandes rasgos, gracias a la inmótica se podrá controlar todo lo que es susceptible de ser automatizado desde un mismo lugar, aportando mayor comodidad, más seguridad y tranquilidad a cualquier edificio.